La policía recibió una llamada a las 6:30 de la tarde de un peatón desde Del Paso Heighs, indicando que un hombre, "presuntamente atacado", yacía en el suelo. Pero cuando los agentes llegaron al lugar donde se produjo el acto de violencia, porque se le podrá llamar así, encontraron a David Senk, de 54 años, en el suelo pero ileso. En ese momento llegó otro viandante que acusó a Senk de haber mordido a su pitón, de casi un metro de largo. En declaraciones oficiales a La cueva News, se mostró indignado: "Sí, sí, fue un acto de violencia impresionante, tremebundo, yo no había visto nada igual (nosotros tampoco, desde luego) ... Se cebó". Y vaya si se cebó, porque al parecer el hombre propinó hasta dos mordiscos a la serpiente. La cueva ha podido recuperar una foto de archivo del agresor:
El animal, que ha perdido varias costillas, se recupera en un centro de cuidado animal, donde tuvo que ser sometido a una cirugía de emergencia. También nos ha querido decir unas palabras: "Pasé miedo. Yo iba despreocupada por la calle hasta que vi que me empezó a seguir desde una esquina... Intenté correr pero sólo pude reptar". Tras unas lágrimas, continuó: "Esto tiene que ser denunciable".
El agresor asegura que no recuerda lo sucedido, aunque deducimos que le debió de entrar el gusanillo y no podía llevarse nada mejor a la boca. A todo esto, se enfrenta a un arresto bajo 10.000$ de fianza, y seguramente se le impondrá una orden de alejamiento ante cualquier reptil.
¿A qué puede deberse esto? Desde La cueva creemos que puede tratarse de una dieta de adelgazamiento mal llevada a cabo o del síndrome posvacacional. Les mantendremos informados.
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